El fascinante juego del GO
Os presento el para mí el más bello, profundo y fascinante de los juegos de mesa. He creado una nueva etiqueta solo para este juego y mensualmente os iré hablando acerca de la historia, la terminología, la visión táctica, estratégica y filosófica, las reglas y diversas leyendas entorno al Go.
He de decir que es un juego para el que se necesita tiempo y meditación, y que no soy aún un buen jugador sino más bien un apasionado y servidor del mismo.
Lo presento con el siguiente texto resumido (completo aquí) de Diego Albuja Ortiz:
Sentado frente a un tabloide de madera pulida, donde se han dibujado 19 líneas horizontales y 19 verticales para marcar el escenario de la lucha que se avecina, cojo una piedra tan esbelta como extraña y me dispongo a efectuar mi primera jugada. El ambiente es místico, solemne; hay 361 intersecciones donde ubicar la piedra y todo podría pasar desde el primer momento. El juego de la vida ha comenzado...
La guerra avanza y la situación se vuelve caótica. Tengo una invasión profunda en el sector derecho, mis piedras están débiles en la esquina superior izquierda y en la ladera sur la batalla es encarnizada. Debo decidir: protejo los territorios ganados, recupero lo perdido, presiono a mi oponente. Cada jugada es vital y puede decidir el destino. Entonces, cojo una piedra y la pongo en el tablero. Su suave sonido rompe la inquietud...
Es realmente simple aprender sus reglas, pero desenvolverse en un tablero tan extenso requiere mucho más que simples cálculos matemáticos, es necesario apelar al sentido intuitivo de posición, de visión a futuro y de estética.
Debemos intuir y manejar el partido de Go de una manera personal; decidir tal como lo haríamos en nuestra vida cotidiana. Cada partida es una obra irrepetible impregnada con el carácter de sus autores: Arte.
La situación se me ha escapado de las manos. Acabo de perder un grupo grande. No encuentro vía de escape. Parece que todas las batallas estoy perdiendo. Debo relajarme. Respirar. De pronto, el tablero se abre y lo veo con claridad. El punto clave está ahí, juego yo y esta es mi oportunidad. Con segundad, pongo la piedra en ese sector y...
Hay 181 piedras negras y 180 blancas, un desequilibrio intencional. Al ubicar una negra en el tablero, se igualan fuerzas entre los oponentes, mas no en el territorio; una blanca equilibra el tablero pero las piedras vuelven a su estado anterior... Así continuamente. Aunque suene extraño, no jugamos contra nuestro oponente, lo hacemos contra el tablero. Si consideramos los conceptos Tao, de lucha de desequilibrios, el juego toma una dimensión más profunda. La victoria y derrota pasan a un segundo plano; lo que importa es aprender... un poco más cada vez. Pronto nos damos cuenta que los esquemas planteados en el Go funcionan en nuestra propia vida. Y pronto nos damos cuenta que el Go ha cambiado nuestra vida para equilibrarla y hacerla más satisfactoria.
La guerra ha terminado. Siento una sensación de quietud como si hubiese sido eterna. He realizado el mejor esfuerzo y me satisface saber que mi contrincante ha hecho lo mismo: Ha jugado con honor. Se retiran los prisioneros, se cuentan los territorios de cada color y se conoce el resultado: he perdido por cinco puntos. Realmente no me molesta. He disfrutado cada momento. Además, he aprendido algo durante esta partida y lo utilizaré en mi siguiente encuentro, y en mi vida. La próxima vez pensaré mejor en mis posibilidades...
He de decir que es un juego para el que se necesita tiempo y meditación, y que no soy aún un buen jugador sino más bien un apasionado y servidor del mismo.
Lo presento con el siguiente texto resumido (completo aquí) de Diego Albuja Ortiz:
Sentado frente a un tabloide de madera pulida, donde se han dibujado 19 líneas horizontales y 19 verticales para marcar el escenario de la lucha que se avecina, cojo una piedra tan esbelta como extraña y me dispongo a efectuar mi primera jugada. El ambiente es místico, solemne; hay 361 intersecciones donde ubicar la piedra y todo podría pasar desde el primer momento. El juego de la vida ha comenzado...
La guerra avanza y la situación se vuelve caótica. Tengo una invasión profunda en el sector derecho, mis piedras están débiles en la esquina superior izquierda y en la ladera sur la batalla es encarnizada. Debo decidir: protejo los territorios ganados, recupero lo perdido, presiono a mi oponente. Cada jugada es vital y puede decidir el destino. Entonces, cojo una piedra y la pongo en el tablero. Su suave sonido rompe la inquietud...
Es realmente simple aprender sus reglas, pero desenvolverse en un tablero tan extenso requiere mucho más que simples cálculos matemáticos, es necesario apelar al sentido intuitivo de posición, de visión a futuro y de estética.
Debemos intuir y manejar el partido de Go de una manera personal; decidir tal como lo haríamos en nuestra vida cotidiana. Cada partida es una obra irrepetible impregnada con el carácter de sus autores: Arte.
La situación se me ha escapado de las manos. Acabo de perder un grupo grande. No encuentro vía de escape. Parece que todas las batallas estoy perdiendo. Debo relajarme. Respirar. De pronto, el tablero se abre y lo veo con claridad. El punto clave está ahí, juego yo y esta es mi oportunidad. Con segundad, pongo la piedra en ese sector y...
Hay 181 piedras negras y 180 blancas, un desequilibrio intencional. Al ubicar una negra en el tablero, se igualan fuerzas entre los oponentes, mas no en el territorio; una blanca equilibra el tablero pero las piedras vuelven a su estado anterior... Así continuamente. Aunque suene extraño, no jugamos contra nuestro oponente, lo hacemos contra el tablero. Si consideramos los conceptos Tao, de lucha de desequilibrios, el juego toma una dimensión más profunda. La victoria y derrota pasan a un segundo plano; lo que importa es aprender... un poco más cada vez. Pronto nos damos cuenta que los esquemas planteados en el Go funcionan en nuestra propia vida. Y pronto nos damos cuenta que el Go ha cambiado nuestra vida para equilibrarla y hacerla más satisfactoria.
La guerra ha terminado. Siento una sensación de quietud como si hubiese sido eterna. He realizado el mejor esfuerzo y me satisface saber que mi contrincante ha hecho lo mismo: Ha jugado con honor. Se retiran los prisioneros, se cuentan los territorios de cada color y se conoce el resultado: he perdido por cinco puntos. Realmente no me molesta. He disfrutado cada momento. Además, he aprendido algo durante esta partida y lo utilizaré en mi siguiente encuentro, y en mi vida. La próxima vez pensaré mejor en mis posibilidades...
7 comentarios:
Hola Sable:
Te dejo estos links sobre el juego por si te interesan.
http://www.goproblems.com/
http://gtl.xmp.net/
http://www.thinkchile.com/playgo/
Saludos,
Si equilibras tu vida no la haces más satisfactoria
Gracias Jose, los tendré en cuenta:
Conocía alguno de los links. Pero más que nada me he guiado por esta colección de libros www.fortunecity.es/imaginario/leyendas/287/espbook.htm
Y diferentes textos del campeón argentino Fernando Aguilar.
Aunque como en todos los juegos lo mejor para aprender es jugar.
Con este texto pretendía que cogierais curiosidad. Más adelante ya os presentaré enlaces interesantes.
Gracias por tu comentario anónimo.
En cuanto a que "Si equilibras tu vida no la haces más satisfactoria" y aparte de lo que dice el texto, almenos yo, lo que espero de mi vida es estabilidad, equilibrio y calma, lo cual te quita muchas preocupaciones, y esto me satisface, mucho más que muchas otras cosas.
Hola Sable.
Te queria decir que el juego es interesante y me gustaria saber de algunas paginas donde se puedan jugar.
gracias desde ahora.
Hola Koinor.
Yo aprendí a jugar en igo server (http://igo.cc/club/enter-e.php). Es rápido y está bien para empezar.
Pero el mejor servidor para mí y en el que suelo jugar es en kgs (http://www.gokgs.com/)
De todas formas aquí tienes una página argentina ( que sé que eres de allí) con otros enlaces como servidores(http://www.go.org.ar/).
Que disfrutes jugando y si tienes cualquier duda no dudes en comentármelo aquí, en el blog o a mi msn: ari_finlandia@hotmail.com
muchas gracias sable
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